Apoteosis del suspense. Kathryn Bigelow nos da una lección de cómo crear tensión en una secuencia, de cómo manejar las herramientas visuales y sonoras para construir, por medio de varias set pieces, una película explosiva, llena de fuerza y vigor. Los personajes son meras marionetas, sí, y el contexto bélico una simple excusa para crear esos momentos de suspense. Cierto. Pero esas secuencias están tan bien realizadas que no importa, no necesita ofrecer esos asideros dramáticos -de hecho a veces sobran- para crear una película notable. Un sobresaliente ejercicio de suspense cinematográfico.
Lo mejor: Las secuencias de suspense
Lo peor: Los personajes están demasiado estereotipados.
La secuencia: Todas las desactivaciones de explosivos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario